Bolivia ha logrado un progreso substancial durante las últimas décadas con respecto a esta meta, ya que la tasa de extrema pobreza ha caído continuamente desde 29.7% en 2000 a 6.8% en 20141.
La pobreza general también ha caído substancialmente, de 66.4% en 2000 a 38.6% en 20152, pero más de un tercio de la población continúan viviendo por debajo de la línea de pobreza nacional.
Identificar y remover los obstáculos críticos para que la gente escape permanentemente de la pobreza es importante para Bolivia.